Quisiera expresaros con estas breves líneas lo que la Falla significa para todos los que estamos metidos dentro de ella. Durante los días de la Semana Fallera, es cuando se realiza la fiesta; cuando el esfuerzo de unos cuantos, a veces demasiado pocos, da satisfacción a tantos; cuando la alegría, el color, la música, el olor a pólvora y la Falla, ofrecen a todos cuantos nos visitan esa Imagen nuestra tan característica. Sin embargo, para nosotros, esto no es lo más importante; quizá lo más importante sean los lazos de amistad que se han tendido entre tantas familias ligadas a nuestra Falla. Ella ha servido para generar esas relaciones, y para facilitar esa comunicación de la que, desgraciadamente, estamos tan faltos hoy en día. Por todo ello, permitidme que me dirija ahora a todas aquellas personas que, por unas razones u otras, no han podido hasta ahora integrarse en nuestro pequeño mundo, para que den ese paso adelante, y que se reúnan con nosotros participando en todos aquellos actos que para todos hemos organizado. Os aseguro que no os sentiréis defraudados, y que seguro que aquí encontraréis verdaderos amigos, que están deseando vuestra colaboración en esta fiesta que todos los valencianos llevamos en nuestro interior.