Como cada año, por ésta fechas, nuestro querido amigo Paco (el Mosca C.) nos anima (o nos obliga) a participar en la confección del Llibret. Así es que éste año he decidido colaborar, pese a mis escasas dotes literarias, con éste artículo. Creía que lo más difícil seria empezar pero una vez superado el primer paso, resulta ... que ya no sé por donde seguir. Pienso.., pienso... y pienso... Solo me ronda por la cabeza una idea que es una pregunta: ¿Qué obtengo yo por ser fallero?; ahí va la respuesta: Después de tantos años de pertenecer a ésta Comisión, he llegado a la conclusión que las juergas, reuniones, diversiones, trabajo y algún que otro disgusto, pasan y se olvidan, al igual que los monumentos falleros se queman. Pero lo que siempre queda y espero que perdure año tras año, es la amistad que hemos logrado gracias a la Falla. Un aludo y felices Fallas. Marzo 2003
