Este grito se lo han oído infinidad de generaciones de jóvenes españoles en la mili, antes de una manera obligatoria para todos hasta que apareció la figura del objetor de conciencia, figura que vino muy bien para todas aquellas ONGs donde su labor era imprescindible. Ahora que la mili no es obligatoria, esa mano amiga ha desaparecido, pero las necesidades no. Sigue siendo necesario alguien que ante un desastre sea capaz de llenar, organizar y vaciar, un almacén con mantas, comida y medicamentos. También hace falta que alguien sea capaz de pasar parte de su tiempo libre haciendo compañía a una persona mayor que vive sola esperando como única alegría la visita de ese joven. Otra cosa que hace falta es alguien que pueda pasar una tarde al mes, con chicos discapacitados, acompañándoles a dar una vuelta, los cuales normalmente la única salida que hacen es esa . Es necesario ir a los hospitales y asilos a compartir parte de nuestra alegría vital con alguien, que por diversas causas no puede disfrutarla por si mismo. Enseñar a aquellos niños que viven en barrios marginados, que hay otro tipo de vida y que vale la pena luchar por superarse, enseñándoles a leer y escribir o simplemente a divertirse sin necesidad de violencia o estimulantes, y que existe un mundo donde los mayores generalmente no son violentos con ellos. Hay tantas cosas que hacer... y tanto tiempo que perdemos en no hacer absolutamente nada. Por eso os pido a vosotros chicas y chicos que estáis leyendo esta carta de ,auxilio, que os comprometáis en algo. Si algo de bueno tiene la juventud de hoy es su gran capacidad, si os paráis a pensar un momento veréis que os puede sobrar una tarde al mes para realizar cualquiera de estos trabajos, hay de muchas clases y para todos los gustos, seguro que en alguno podréis encajar. Y si llegáis a este convencimiento y hacéis algo, os daréis cuenta que es uno de los mejores trabajos del mundo, ya que aunque no se cobra nada por ello, recibiréis en satisfacción personal más que en ningún otro trabajo y un aprendizaje de la vida de matrícula de honor cum laudem. Por eso os digo, sobre todo porque os conozco. VOLUNTARIOS... UN PASO ADELANTE.
